Descripción
Los Caballeros Dorados se reúnen en el Inframundo y lanzan todo su cosmos en una flecha de Aiolos y, entonces, ocurre el milagro: el Muro de los Lamentos es destruido. Sin embargo, atravesarlo es un suicidio para aquellos que no son dioses. Seiya y los demás se enfrentan a una encrucijada: morir desintegrados o pasar sanos y salvos.